ON THE ROAD

Está mañana cuando venia a mi lugar de trabajo en mi cochecito como de costumbre he pasado por un pueblo de Madrid que se llama El Vellón es un pueblo digamos que un tanto pequeño no de los pequeños pequeños entre los montes.

Imaginaros la situación yo entre curva y contra curva, noche casi cerrada con un frio de esos casi invernales solo en la carretera a que empieza a acojonar en esa situación me encontraba conduciendo eso si con calefacción y musiquita cuando un poco antes de entrar en El Vellón que por cierto es bonito el pueblo aunque apenas lo conozco, con gente muy simpática aunque conocer creo que solo conozco a una persona pero bueno ya sabéis uno que tiene la mala costumbre de generalizar, si os soy sincero solo conozco un bar que estaba muy bien sobre todo que se lo digan a un amigo que allí encontró el amor fue una historia breve es cierto pero intensa aunque muy breve pero bueno joder fue una historia de amor apasionado o eso fue lo que nos contó aunque me da a mi que nos soltó alguna que otra mentirijilla pero esa es otra historia.

A lo que iba me faltaba poco para de entrar en el pueblo cuando me encuentro en el centro de esa carretera aislada en medio de la nada por la que pocos coches pasan algo oscuro que venia hacia mi, en unas fracciones de segundo mi cabeza empezó a analizar todas posibilidades y dedujo:

1.- Un tipo que ha decidido darse el paseo matutino pero claro a -3ªC como que no es muy probable en un jueves.
2.- Un extraterrestre que puesto que es un pueblo un poco aislado en una carretera poco transitada venia a abducirme esto es más probable ya que era yo a quien habían designado para viajar gratis a su planeta.

Yo seguí frenando y cada vez más cerca y no se detenía el coche mientras veo que eso oscuro que se dirigía hacia mi no era ni el caso 1 que me hubiese dado igual ni el caso 2 que me hubiese hecho mucha ilusión sino fuese porque en estas fechas puedo hacer lo que más me gusta que es comer dulce y no hablemos de los regalos que con lo bueno que he sido este año fijo me traerán muchísimas cosas, pero bueno esa es otra historia.

Y que era lo que en un par de segundos como mucho impactaría sobre mi coche joder pues que va a ser un caballo que puede ser, si ya se que lo normal es que vaya con el dueño pero está vez no pudo ser porque la noche anterior al fin había tenido suerte y tocaba fiesta en casa, como es normal estaba en plan romántico con la compañía pensando que seguro que toca uno mañanero y no estaba para sacar al caballo a que se diese el paseito matutino de rigor, pero bueno esa es otra historia.

Al fina haciendo gala de unos reflejos propios de un jugador de polo consegui esquivar al caballo asesino también tiene que ver que iba al paso que si llega ir al galope ni de coña eso si no pude evitar acordarme de la santa yegua que le parió.

Pero no penséis que uno se ha asustado y piensa en no volver a pasar por esa carretera que va si está vez no ha sido para tanto hace como un par de años me paso algo peor aun casi tengo pesadillas de una colisión frontal contra una vaca que tenia unos pitones uff que pedazos pitones y eso si que acojona porque te puede pinchar el airbag con lo problemático que es es, pero bueno esa es otra historia.