EL VIAJE DE ADOLFO (1ªPARTE)
Adolfo Fernández es un tipo de 37 años con su casita hipotecada no le preguntes por cuanto tiempo que no lo sabe, tampoco le interesa, casado con una mujer desde hace varios años, con la que ha tenido una hija, el quería que fuese niño pero su mujer desde el segundo mes ya sabía que iba a ser niña no dejaba de repetir entre bromas “con lo que está molestando solo puede ser niña” claro el quería que fuese niño para poder enseñarle a jugar al futbol y tener alguien con quien gritar cada domingo cuando su equipo ganase o perdiese (la mayoría de las veces) pero ahora está intentando comprender el complejo universo Bratz con lo difícil que es eso.
Trabaja de comercial para una empresa de ladrillos de la que hasta hace poco ignoraba su existencia, también las impresionantes funciones del ladrillo pero como le llamaron por culpa de un curriculum que envío en plan spam alli se puso a trabajar, total si le sirve para pagar las facturas además le encanta eso de estar todos los días de un lado a otro, el siempre ha odiado el estar todo el día metido en una oficina enfrente de un ordenador, bueno el ordenador si le gusta pero solo para visitar ciertas paginas pero estas no se pueden ver en el trabajo con lo que le da igual.
Adolfo se pasaba todo el día intentando vender “la última maravilla, el ladrillo que está empresa tras años de colaborar con diferentes universidades de EEUU ha llegado a desarrollar, dicho ladrillo entre las diferentes características que lo hacen especial se encuentra la de ser él único con 8 agujeros para no abrumarle con los datos, solo tiene q hacerse a la idea de si es bueno uno de 6, como tiene que ser de 8 es la nueva evolución del ladrillo, según diferentes estudios realizados por laboratorios ajenos a los de está empresa que se los puedo enseñar cuando deseen, así lo certifican ...” que bien le quedaba este texto que con tanto cariño había sido escrito por la mujer de su jefe el Sr. Manolo el presidente de la fabrica de ladrillos “La tabiquera”.
Pero esa mañana iba a ser diferente para Adolfo se encontraba visitando a un posible cliente con su ladrillo de muestras en la mano – este ladrillo era especial porque era el de para vender los demás no tenían esa capita que lo hacia más resistente que el resto, cosas del marqueting – en ese preciso momento sucedió, Adolfo pendiente de dar un buen apretón de manos cuando viese al jefe de obra no se fijo que delante suyo se encontraba una pala que algún operario había dejado donde no debía, como es normal Adolfo tropezo con dicha pala y al desequilibrarse pensó “joder tengo el ladrillo de muestras en la mano, cuidadin no se me caiga que ya he roto dos este mes y me lo descuentan de la nomina” por eso intento agarrarlo con las dos manos, dejando descubierta la cabeza, con esto de las prisas y dar buena imagen no había buscado ningún casco, como siempre pasa en estos caso su cabeza impacto contra la rueda de la hormigonera.
En medio de la oscuridad se hizo la luz y Adolfo empezó a sentirse muy ligero como nunca se había sentido y se dejo llevar, sintió como flotaba y al girarse se vio tumbado rodeado por un grupo de trabajadores y el jefe de obra gritando “cagó en la ostia, no llevaba el casco ya veras como se entere el de seguridad y salud, la hemos cagado”, no sintió nada especial Adolfo al oir esto se volvió a girar y vio como entraba en un túnel.
Continuará o no.
Etiquetas: EL VIAJE DE ADOLFO
12 Comments:
Desde cuando respeta los signos de puntuación, pez? Por cierto, le veo bien después de tanto tiempo! xD
más que el viaje de adolfo...¡menudo viaje se ha pegado el tío!!...seguramente detrás de ese túnel encontrará el trabajo perfecto, la mujer perfecta, el hijo perfecto, la vida perfecta; pero volverá a salir del túnel y regresará a la realidad absoluta
:)
gran chimp buena observacion como hace tiempo no se ve por aqui, la causa de este respeto tanto a la gramatica y a la sintaxis se encuentra en que al parecer los cafetitos en la RAE son buenisimos por no hablar de las fiestukis que se montan y claro uno quiere ir alli.
maestra en practicas no se me había ocurrido que todo esto del accidente fuese para irse de casa a cambiar de vida, claro como ahora no se puede fumar a tenido que liar todo esto.
Me temo que continuará en la otra vida enladrillada, y el desenladrillador que la desenladrille, buen Adolfo regresará.
Parece que la vida de Adolfo era algo frustrante y ahora va a pasar algo...que continue please....La curiosidad me da hambre...
Besitos!
Volveré.... para ver que le pasa a Adolfo
;)
luis cuando el poder del ladrillo te atrapa no puedes escaparte, eres parte del ladrillo.
cazadora uy que va si el era feliz así de comercial todo el día de un lado para otro haciendo sus compras después de llevar a su hija al cole por no hablar de todos los cafetitos y copitas que se tomaba con los clientes.
aiyana no me presiones que me vengo abajo facilmente
A ver como acaba esto pero de momento da mal rollo la situación en la que se encuentra el pobre Adolfo.
chasky primero a saber como termina que no tengo ni idea y si su situación no es muy agradable.
El tío va a hacer la venta del siglo, con tal de que no les denuncie, esos le compran los ladrillos de por vida...
Yo pensaba que Adolfo iba a matar al cliente xD
enlaoscuridaddelanoche claro está usando el típico truco del accidente laboral, estos comerciales se las saben todas.
céline era una opcion cuando a empezado a elevarse su espiritu sobre su cuerpo podía a ver cojido el ladrillo y hacer una comprobacion de su dureza pero lastima que Adolfo en el fondo sea un pedazo de pan.
Publicar un comentario
<< Home